Un segundo ciudadano español logró salir de Gaza este jueves. Se trata de Jesús Sánchez, empleado de UNSCO, la oficina de las Naciones Unidas para el proceso de paz en Oriente Medio. Sánchez figuraba en la lista de 500 cooperantes internacionales, miembros de ONG y empleados de agencias de la ONU con pasaporte extranjero que las autoridades de Gaza hicieron pública el miércoles. También estuvo el anestesista valenciano de Médicos Sin Fronteras Raúl Incertis, que abandonó el territorio palestino el miércoles. Mientras que este último logró cruzar el paso fronterizo de Rafah y llegar a Egipto ese mismo día, el segundo no lo hizo hasta el jueves. Más allá de estas salidas a cuentagotas, el Gobierno español, como el resto de países con ciudadanos atrapados en la Franja, está negociando su evacuación con Egipto e Israel.
El Consulado General de España en Jerusalén tiene una lista de 140 ciudadanos con pasaporte español atrapados en Gaza desde que Hamás lanzó su ataque contra Israel el 7 de octubre, y el ejército israelí impuso un asedio a la Franja dos días después. La mayoría de ellos tiene doble nacionalidad, española y palestina, y han manifestado su deseo de marcharse. La cifra podría aumentar a alrededor de 170 con la inclusión de los miembros de la familia.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, afirmó este jueves que este grupo de españoles y sus familias podrían ser evacuados en las próximas 48 horas. Una vez que el Ministerio del Interior de Gaza, bajo control de Hamás, autorizó la salida de extranjeros de la Franja, las autoridades israelíes y egipcias estaban informando a los países afectados, añadió Robles.
Evacuación aérea
«Allí está todo preparado para ir a buscar a los españoles entre hoy o mañana», dijo la ministra a los periodistas en la base aérea de Torrejón de Ardoz (Madrid). La Embajada de España en El Cairo ha preparado un equipo de recepción y el Ejército del Aire tiene listo un avión Airbus 330 para ir a recogerlos a Egipto, como hizo los días 11 y 12 de octubre con 429 ciudadanos de diferentes nacionalidades (334 de ellos españoles) que fueron en un viaje turístico o de negocios a Israel y quedaron varados debido a la suspensión de vuelos comerciales. “Si es necesario realizar una evacuación aérea, se hará”, subrayó el ministro.
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Fuentes diplomáticas se muestran muy cautelosas sobre el momento en el que se puede proceder a la evacuación del grupo, ya que la situación dentro de la Franja es muy difícil (la carretera que conecta el norte y el sur ha sido muy dañada, hay escasez de combustible y ningún vez se han interrumpido los bombardeos) y el cruce del paso de Rafah es muy complicado. Prueba de ello, alegan, es que el segundo español que logró abandonar la franja lo hizo 24 horas más tarde de lo previsto.
Un total de 342 ciudadanos con pasaporte extranjero lograron salir de Gaza este jueves, en el segundo día de apertura del paso de Rafah, junto a otros 21 heridos, lo que eleva el número de evacuados en 48 horas a casi 700 extranjeros y un centenar de heridos. El mismo paso se utiliza para la entrada de ayuda humanitaria, aunque a una escala mucho menor de lo que era habitual antes de que comenzara la actual escalada bélica y muy alejada de las necesidades de la población. España ha aumentado su ayuda humanitaria a Palestina de 17 a 21 millones de euros y se ha comprometido a duplicarla en los próximos días, hasta superar los 40 millones.
Aunque el Gobierno español abogó por un alto el fuego para proteger a la población civil de Gaza, la UE aceptó limitarse a pedir a Israel pausas temporales para facilitar el acceso de la ayuda humanitaria. España también se ha ofrecido a acoger una futura Conferencia de Paz en Oriente Medio similar a la que tuvo lugar en Madrid en 1991. Pero la idea, más allá del apoyo de la UE, no ha encontrado eco entre los principales actores del conflicto.
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